A Cáncer le gusta
la creatividad, los valores familiares, poner a trabajar la imaginación
De todos los signos del Zodíaco, ninguno es más sensible, cariñoso e intuitivo que Cáncer. Es un ser tan receptivo a su entorno que busca ante todo la seguridad para sí mismo y para los que le rodean. De hecho, nunca emprende ningún proyecto sin pensar en el bienestar y la seguridad de su familia.
Cáncer está más influenciado que los demás signos por las fases de la Luna, por lo que se dice que es lunático. Sin embargo, no es cuestión de mal carácter, sino de que es muy sensible a las energías de este astro. Con frecuencia hace gala de una extrema amabilidad y siempre se muestra dispuesto a echar una mano. Le gusta ser útil, sobre todo a las personas que le rodean, por las que estaría incluso dispuesto a dejarse la piel. Sin embargo, también puede mostrarse susceptible si hieres sus sentimientos y puede rehuirte largo tiempo si le haces enfadar mucho. Es de carácter nervioso y ansioso, y tiende a somatizar fácilmente las contrariedades.
la creatividad, los valores familiares, poner a trabajar la imaginación
discutir, llamar la atención, los comentarios desagradables
Los asuntos del corazón ocupan un lugar preponderante en la vida de Cáncer, ya que son, por así decirlo, el motor de su existencia. Cáncer siente el deseo irrefrenable de amar y ser amado, siempre en un clima de confianza absoluta. No es un gran seductor, por lo que prefiere avanzar a pequeños pasos para comprometerse en una relación, ya que necesita estar seguro por encima de todo. Ese es el gran problema de este signo: Cáncer busca constantemente que su pareja ratifique sus sentimientos. Si empieza a sentir que ocupa un segundo plano, sufre una gran ansiedad. Necesita sentirse en comunión con la persona que comparte su vida.
Cáncer es un signo muy sereno. Su demanda de calma es tal que, si cree haber encontrado a la persona ideal, se comprometerá rápidamente con el propósito de crear un hogar. Mientras sienta que su pareja le profesa amor incondicional, estará dispuesto a sacrificarse y a perdonarlo todo.
Tanto en la amistad como en el amor, Cáncer no se toma las cosas a la ligera. A menudo no le apetece hacer muchos amigos, porque su familia suele serle suficiente. A decir verdad, no le gusta mucho conocer gente nueva, pero si llamas su atención, es porque tienes algo distinto que te hace destacar. Si Cáncer te acepta como amigo, no lo hace sin pensar; para él significa que formas casi parte de su familia.
Para Cáncer, los amigos son como hermanos en los que puede confiar cuando hace falta y cuya situación le preocupa enormemente. De sus amigos espera también complicidad emocional, ese tipo de relación en la que no es necesario hablar con el otro para entenderse. Prefiere las relaciones amistosas de tú a tú, pero también puede sentirse a gusto en un grupo entre cuyos miembros haya fuerte conexión.
Cáncer es uno de los signos más creativos del Zodíaco. A menudo alberga ideas vanguardistas que pronto le hacen destacar ante sus superiores y le permiten subir posiciones más rápido que sus colegas. Sin embargo, es leal tanto con su jefe como con sus compañeros o sus clientes, y nunca se vanagloriará de sus éxitos, porque es discreto y reservado. Sabe adaptarse a todas las situaciones, aunque no le gusten mucho los cambios. Y cuando sus intereses o los del grupo al que representa están en juego, es capaz de salir del caparazón para defender sus ideas.
Si algo no le gusta a Cáncer es la falta de honradez. Pase lo que pase, se muestra sincero y no es de los que asesta golpes bajos a los colegas. Sabe mantener la sangre fría en cualquier circunstancia a fin de encontrar la mejor solución a un problema. Gracias a su sensibilidad y a su sentido de la diplomacia, favorece el buen entendimiento casi siempre. Además, es capaz de demostrar una gran empatía para ponerse en el lugar de sus compañeros y mejorar el ambiente que reina en su equipo laboral.
Para Cáncer, la familia es sagrada y está dispuesto a defender lo que considera como su clan. Es esencial para su desarrollo personal, ya que Cáncer no se plantea tomar ninguna medida importante sin el consejo de sus allegados. Nunca tomaría una decisión que pudiera causarles ningún perjuicio.
Cáncer mantiene un vínculo muy estrecho con su madre, una unión casi indestructible que se asemeja a una fusión. Por lo tanto, una mujer Cáncer tenderá a identificarse totalmente con su madre, mientras que un hombre Cáncer le pedirá muy a menudo opinión. Evidentemente, esto repercutirá sobre su vida de pareja y su cónyuge deberá en todo momento respetar a la suegra. Para Cáncer, este punto no es negociable, ni siquiera si la relación con sus padres ha sido tensa en el pasado. Siempre tratará de estar cerca de su familia y, si las relaciones son demasiado complicadas, se aventurará a crear la suya propia lo antes posible.
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